Es tan conocido en España que hay hasta una cofradía del salmorejo cordobés.
Es ideal, reduciendo un poco el aceite y el pan, cuando quieres cuidar un poco el peso. Tiene pocos ingredientes así que, intenta que sean de buena calidad. El sabor final te lo agradecerá. Encontrarás muchas recetas de salmorejo cordobés, pero el auténtico lo he sacado precisamente de esa cofradía.
Ingredientes: Con esta cantidad sale, aproximadamente, un litro.
1 kilo de tomates. Cuanto más maduros y rojos, sin llegar a estar blandos, más sabroso sale.
200 gramos de pan blanco (en Córdoba utilizan el pan de telera)
1/2 diente de ajo (si te gusta más picante, aumenta la cantidad a un diente)
100 gramos de aceite de oliva
10 gramos de sal
Preparación:
Cortar los tomates en cuatro trozos quitando lo blanco del rabito. Añadir el pan a trozos pequeños, el ajo y la sal. Triturarlo muy bien con la batidora o la thermomix. Una vez que esté bien triturado, ir añadiendo el aceite,enun hilillo sin dejar de batir, para emulsionar el triturado. Pasar el triturado por un colador o un tamiz si no te quieres encontrar ninguna pielecita. Si lo haces con thermomix no es necesario porque lo deja muy, muy fino. Meter en la nevera.
Servir fresco y decorado con un poquito de jamón picadito y un trozo de huevo cocido.
Hay que tener en cuenta que la consistencia del salmorejo es espesa, para que se pueda comer con cuchara sin que chorree. Si queremos un salmorejo más líquido, hay que añadir un poco más de tomate o quitar un poco de pan. Eso sí debe ser ya a tu gusto.
Espero que os guste..Un saludo